El anuncio decía estar en muy buen estado, llevar una segunda capa de barníz en el mástil, un pequeño golpe y pastillas seymour duncan vintage (lo de que era como un Pino Palladino supongo que se refería a una mierda como un pino)... Ahora la realidad con la que me encontré:
El alma está rota y aunque no lo estuviera con una llave normal no se puede ni siquiera aflojar porque no le queda dibujo a la tuerca, lo ha comprobado un amigo luthier con una "llave allen especial" para estos casos. Así que con el alma rota y si no va a peor el bajo tendrá que quedarse siempre con la acción que tiene ahora mismo; la altura de las cuerdas con el bajo en afinación estandar queda a 9 milimetros del diapasón en los últimos trastes, a 8 y pico en el traste 7 y a 5 y pico en el tercer traste.. y lo mejor es que no aguanta la afinacion, o sea que vas todo el rato curvando aun más el mástil. Como os podréis imaginar es imposible tocar con el. Además el diapasón es visiblemente más delgado en los últimos trastes que en los primeros, algo que dudo mucho permitan que ocurra en una fábrica de Fender... Aquí comienza lo bueno.
Llevé el bajo a la tienda de un amigo que es distribuidor Fender oficial para que me diera su valoración y me dijo que es imposible que este bajo sea un Fender Mexicano.
Pero aun en el supuesto caso de que este fuera un Bajo Fender MIM original, hay que ser muy burro para borrar todo rastro reconocible del mismo. Bien, pues este tal Mercader lo hizo: Supuestamente borró el logotipo original de Fender, el modelo, el "made in Mexico y hasta el nº de serie. en todo el bajo no queda ni una sola marca distintiva. Luego alegremente colocó un decal con la única palabra "Fender" y barnizó con brocha no solo la pala, y no el mástil como decía, que luego resultó estar sin barnizar, si no que.... BARNIZÓ CON BROCHA EL DIAPASÓN!
Ante semejante majadería llegué a preguntarme si realmente había tratado con un adulto o con una persona con una discapacidad intelectual severa, en cualquier caso el barniz se pega a los dedos y supongo que auque el bajo estuviera en el "muy buen estado" que el Mercader prometía al rato de estar tocando, debido al calor y a la naturaleza del barniz, tampoco podría tocarse porque las cuerdas acabarían pegándose y poniendose todo asqueroso. Total, un plátano.
Ya todo lo demás, que el pequeño golpe fuera en realidad un boquete, que las pastillas no fueran las que se anunciaban si no unas mucho más baratas, que el color red fiesta sea naranja fosforito lleno de grumos encima de un de una pintura plateada en spray... a estas alturas poco importa.
Tras encontrarme con el pastel le envié un mail donde muy amablemente le comunicaba mi sorpresa ante el estado del bajo, le decía que no era lo que esperaba ni lo que el anunciaba y que deseaba realizar una devolución, a lo que el pollo me dijo que tururú, que el bajo estaba perfectamente y que el lo habia explicado todo muy bien en el anuncio.
Sin perder las formas le expliqué que si hacía la reclamación ante paypal, alegaba y demostraba que este no es un bajo Fender original paypal no iba a permir que se lo devolviera, ya que según sus propias normas de devolución una falsificación debe destruirse para que no vuelva de nuevo al mercado. Esto ya me ha ocurrido en otras ocasiones y te hacen mandar una declaración jurada confirmando que ya has destruido el artículo.
Y en esas estamos el tío a día de hoy sigue soltando las mismas mentiras, se niega a dialogar y yo me cansé de intentar ser civilizado y comprensivo con alguien que me estaba robando y tomando el pelo. Ahora unas fotos para deléite de tod@s:









