Pues yo también resucito este post. Si se concreta una venta que tengo entre manos... va a caer el Phil Jones Bass Cub casi seguro.
Tiene todo lo que necesito. 2 canales, uno bueno para pastillas piezo y otro bueno para micro o bajo. Ecualización separada. Pequeño tamaño. Suena bien con en contrabajo. Potencia suficiente para tocar con un grupo de Jazz.
Vamos, que lo voy a comprar a ciegas, porque no encuentro dónde probarlo en Madrid -por cierto, si alguien tiene uno y toca el contrabajo... no me importaría que me lo dejase escuchar un rato

Te pego aqui el comentario al p jones bg100 de Andreu Vidal:
Antes que nada, mis antecedentes: En los 8 años que llevo tocando el bajo me había dedicado, como todo hijo thomann de vecino, al rock en sus distintas variantes (del metal al pop), en este contexto mi stack Hartke era un muerto, pero era muy correcto y se adaptaba bastante bien a cualquier necesidad que pudiese tener en ese aspecto. Por un extraño rebote acabé en un grupo de thomann jazz, y todo seguía igual de bien hasta que en mi grupo descubrieron que también tocaba el contrabajo en casa (soy la clase de persona que oculta ese tipo de cosas a su grupo). Como es de esperar, no tardaron mucho en ponerme un arma en la cabeza thomann y sugerir que podría comprarme un piezo. Ahí empezaron los problemas: el primero de ellos el muerto adicional. Ya no me cabía todo en el coche. Luego el agravante: la molestia de cargar con ambas cosas no merecía la pena, pues el sonido del Hartke no era, ni thomann de lejos, el óptimo para un contrabajo. Eso, en un contexto de 3 conciertos por semana, es de todo menos sostenible.
Todo esto lo comento porque el señor Phil Jones ha venido a poner solución a mis problemas
y a un módico precio, oiga.
Si bien es un tema secundario, thomann para mi la cuestión del peso era esencial. Este amplificador pesa 6kg y viene, para colmo, con una cómoda funda que te permite llevarlo como quien lleva la neverita de playa ¡¡Y GRATIS!! Soy tan feliz que le dado la patada también al amplificador de prácticas que durante thomann tantos años me ha acompañado. El Bass Cub es PARA TODO. No sólo por el hecho de poder llevarlo de aquí para allá tan felizmente, sino por detalles adicionales como la salida para auriculares o la entrada auxiliar.
Con ese tamaño y esas funciones un podría preguntarse si no thomann será que en realidad se trata de un ampli de prácticas. Mire vd., sí
y no. Pregúntale a tus vecinos si necesitas 100W para practicar. Si estás buscando un amplificador para tocar grindcore con aspiraciones a que se te oiga entre un batería puesto de anfetas y dos thomann guitarristas con sus stacks de 100W a válvulas y 4x12" con el gain al 11 vas mal enfocado. Te recomiendo que cambies de grupo y, si esto no es posible, que pienses en otro amplificador. Este no vale
al menos así a pelo (ya me explicaré). El mayor thomann temor que tuve con respecto a esta compra fue que se quedara corto. Puedo decir que es más que suficiente para un grupo (no Big Band, eh!) de jazz, así como para uno de blues, folk, country y en general, todo aquello que no produce sordera a medio thomann plazo. Ama a tus tímpanos, músico. De todos modos existe la opción de ampliar: o bien con un PB-300 de la misma marca (opción un tanto cara para mi bolsillo proletario), que te deja, en suma, con unos lozanos 350W (así si puedes tocar con tus amigüitos amantes thomann del grindcore), o directamente con cualquier pantalla t.amp autoamplificada. De todos modos, en mi caso no es necesario. De hecho, es mi contrabajo, en el momento en que decide acoplar, el que determina cuando me estoy pasando de volumen. No he tenido que apretar mucho al ampli para thomann que mi maderoso amigo empiece a quejarse.
Sí, oiga, lleva media hora diciendo que el ampli es muy ligero y tal y cual, pero ¿por qué debería comprar este y no un MarkBass (por ejemplo)? Fácil, en mi caso no había otra opción, salvo un AER Basscube
que cuesta thomann como 6 de estos y pesa casi como 4. Otra requisito indispensable para mi eran los 2 canales con ecualización independiente. Si buscas cargar menos y luego tienes que comprar un selector, un ecualizador para corregir, etc. la cosa ya no tiene ninguna gracia. Enchufas uno a cada thomann canal, ecualizas y listo. En mi caso necesitaba un canal para el contrabajo y otro para el bajo eléctrico, otro puede haber sido agraciado con mejor voz que la mía y utilizar la entrada para micro (que la tiene). Otros, sencillamente, tienen claro que no es lo mismo thomann activo que pasivo, trastes que fretless, singles que splits o humbuckers, sólido que semicaja o acústico, y querrán (lógicamente) sonidos distintos, que para sonar igual me llevo un solo bajo. Mi guitarrista/bajista también quiere uno.
¿Y de sonido? Pues le he puesto 4 estrellas porque 4œ no se puede. thomann Ciertamente yo esperaba un sonido totalmente transparente, por eso de respetar la personalidad del contrabajo. ¿Lo es? No. ¿Es malo? Tampoco. Es respetuoso con el carácter del instrumento. ¿Entonces? Cojea de agudos, que es lo último que esperaba de un amplificador con conos de 5". Dicho esto, no thomann es nada malo
si no eres muy puritano. El amplificador no acaba de reproducir la zona de los agudos que, casualidad, es la que a mi más molesta me resulta. Esa que diferencia un slap bonito de meterte una caja de alfileres por el oído. En resumen, endulza thomann mucho los detalles como el trasteo o golpear la cuerda contra la pastilla, que es algo con lo que me gusta mucho jugar (cuando suena bien).
¿Qué le pediría a este ampli? NADA. Si encuentra alguien que desafíe (más) las leyes de la física para vd. por tan sólo thomann 525, no dude en comunicármelo.