Aunque en la bellísima foto pareciere que el cable negro es más corto, no es así. Descansa delicadamente cruzado por detrás de la pastilla. Llevan cable a jodelo (más que suficiente).
Usadas durante unos cuantos años para regocijo de las audiencias más exigentes y refinadas aún conservan sus cualidades al 100%. Hasta el lunes pasado no fueron relevadas en el jb por unas Lolas.
Unas pastillas muy recomendables para que el bajista mazaroco haga las delicias del público más selecto, del menos, o de cualquier tipo de escoria humana incluido uno mismo. Garantizado por el vendedor.
90 estupendos eurazos y envío a cargo del comprador.
Ahí os quedan, marikonas.
